viernes, 8 de octubre de 2010

El retrato de los Hidalgo

(Participación en el concurso de Paradela) 

Capítulo II: El retrato de los Hidalgo

Es curioso que a pesar de la transformación que había experimentado el despacho, permanecía idéntica la posición de un retrato que tantas veces había contemplado. Se trataba de una pareja de esas de antaño. De las que se casaban jóvenes y tenían muchos hijos y vivían felices hasta que la vida se les agotaba. Siempre me había deleitado contemplando la peculiar escena que trasmitía serenidad, rectitud y humildad, valores tan apreciados por mí.
Se trataba del retrato de boda de los padres del inspector Hidalgo, mi hasta ahora jefe. Era admirable la devoción que siempre había demostrado por ellos. Su madre se llamaba Ana y su padre, Juan.
- En ellos tuve mis mejores consejeros.
Lo extraño era que el nuevo jefe conservara la citada pieza y, más aun, que Hidalgo la hubiese dejado en el despacho. Realmente sí que había perdido cualidades.
Mientras yo cabilaba en silencio, la silla giratoria viró de tal manera que pude ver el rostro de mi nuevo jefe, o mejor dicho...
- ¿Señorita Candela?- exclamé contrariado.
La interpelada colocó el sombrero sobre el mostrador y se acercó para darme su mano, blanca como la nieve, en gesto de saludo.
- ¿Sorprendido, inspector Ares?
- Con sinceridad... sí. No tenía noticia sobre su ascenso- contesté al instante.
- Ya ve, a pesar de que mi tío quería que continuara cursando masters en el extranjero, insistí en incorporarme al trabajo.
La señorita Candela, como yo la había llamado, era la sobrina del inspector Hidalgo. Una excelente licenciada en criminología. Una mente privilegiada, y a pesar de lo que pudiese pensar la gente, yo sabía, con certeza, que si estaba donde estaba era porque valía.
- ¡Mucha cultura del pelotazo es lo que hay aquí!- chismorreó indignado Antonio mientras Lluis asentía con la cabeza.
- No seáis malpensados; la inspectora Hidalgo tiene un expediente envidiable. Es un honor contar con una profesional como ella en la oficina.
- Sí, pero no tiene la experiencia que tenemos nosotros y... por mucho que digas se ha valido del enchufe- refunfuño Antonio.
- Además... es una mujer- soltó Lluis.
- No seas cromañón ni machista- grité- sabes que no soporto comentarios de ese tipo. Una mujer tiene la misma perspicacia que un hombre, incluso en ocasiones diría que más, ¿no crees?
- Perdón- se disculpó- pero es que la envidia es muy mala.
- Y tanto- murmuró Antonio.
- Ahora lo que debemos hacer es integrarla en el grupo y mostrar toda la amabilidad que nos sea posible- dije dirigiéndome a Lluis y después a Antonio.
- Sí, papá- respondieron ambos al unísono.
Les iba a dar con la carpeta para que no siguieran con la burla cuando entró la inspectora Hidalgo.
- Ya veo a qué se dedican.
- No piense mal, inspectora- respondí inmediatamente- estabamos descansando unos minutos.
- Muy bien, pues ya tienen aquí entretenimiento.
Tiró una carpeta sobre el mostrador de Lluis.
- A las seis les espero con los informes terminados. Tengo que hablarles de un nuevo caso. Buenas tardes.
A continuación pegó un portazo y se esfumó.
- Para que veas- Antonio se levantó y me dio una palmadita en la espalda- Integración y amabilidad. Menuda fiera.
- Ala, ala- les ordené mientras me sentaba en el mostrador- a trabajar, que si no lo mismo nos dejan sin jornal.
Los tres reímos y nos pusimos manos a la obra con los informes.
Realmente la señorita Candela había entrado pisando fuerte. No esperaba menos de ella. Era una mujer inteligente y con recursos que no se iba a dejar acobardar por una panda de neanderthales. Pero, ¿qué nuevo caso habría llegado a la oficina? Extraño era que no me huebiese enterado de nada. Algo gordo tenía que ser.

16 comentarios:

Dilaida dijo...

La historia sigue y me gusta, muy buena idea la de la foto del concurso de María Jesús. Yo también participo, mañana saldrá mi entrada, aunque al lado de las vuestras no tiene nada que hacer.
Bicos

Anónimo dijo...

Menudo contrincante nos ha salido en el concurso de Paradela...jejejeje, prometen estos relatos seguir con una intriga que nos dejará espectantes hasta la próxima entrega...
Bueno, mujertenia que ser...para que se lo cuestionaran los tipicos"cromañones y machistas"...al parecer ingrediente común y tan real como en la vida misma...
¡suerte¡

Txema dijo...

Muy interesante. La señorita Candela es un ogro y no es un comentario machista. Jajaja.

Saludos

ARO dijo...

Bienvenido al club de los concursantes de Paradela. Tu relato es muy bueno. A ver quién se lleva esta vez el gato al agua. Suerte.

Anusky66 dijo...

he llegado a tu blog por el concurso de Paradela y me ha gustado mucho la forma en que has incorporado el retrato a la historia .
Continuaré leyendo la historia del misterioso sombrero negro .
besos y suerte

mariajesusparadela dijo...

Marcos, sabes bien que como quedó establecido en la convocatoria del segundo concurso, uno de los objetivos es dar a conocer los blogs de los participantes. Si con esta participación consigues que aumente el número de tus seguidores y que lean todos los capítulos, para mi será un orgullo.
Sabes que también tu tienes que ir a comentar a todos para luego poder votar.
Gracias por participar.

Alicia dijo...

La intriga que siento por el retrato olvidado de seres tan amados por el antiguo jefe me deja expectante por saber el final. Te deseo mucha suerte en el concurso. Un saludo

Encarni dijo...

Me encantan los comentarios que hacen los hombres cuando están solos sobre las mujeres, algunos son dignos de estudio sobre la igualdad y cosas así.

Me ha gustado mucho como has incorporado la foto al texto, y el desenlace sobre los diálogos.

Un saludo y suerte.

emejota dijo...

Resulta que me has dejado intrigada. Mientras iba leyendo tu relato me parecía estar escuchando una serie policíaca. Muy logrado, si señor. Bienvenido al concurso Paradela, ese que consigue hacer buenos amigos de lo más diverso en la red.
Mañana me toca publicar, pero lo mejor no será de mi cosecha, sino musical. Un abrazo.

nocheinfinita dijo...

En la primera lectura no lo entendí bien, pero al leer el capítulo uno... encajaron las piezas.

Espero la tercera entrega, creo que me va a interesar la señorita Candela, :)

Un saludo

noche

ibso dijo...

Buen relato de intriga y suspense. He de leer la primera parte aún, pero esta me ha recordado las películas de policías en blanco y negro. Suerte en el concurso.

Con su beneplácito, lo seguiré durante un tiempo. Un saludo, Ibso.

ignacio dijo...

siempre hubo en la literatura dos corrientes
una que primaba el contenido de loq ue se escribe
y otra para la que lo importante son los recursos estilisticos, por encima de lo que se relata
a poco voy encajando la historia
y personalmente me recreo con lo que "aparentemenet" son brindis al sol, como ese retrato que encabeza la fotografia de la entrada de hoy, y tu descrpción de sus personajes.

Calvarian dijo...

Caray...me parece que la Candela tiene los ovarios bien puestos. Los neanderthales no podrán con ella parece.

Saludos de concursante

Marcos dijo...

Gracias a todos los que hayáis querido dejar vuestra huella en mi posada con buenas intenciones.
Saludos, transeúntes.

Alma Mateos Taborda dijo...

Muy buen relato. Mucha suerte en el concurso. Un placer leerte. Un abrazo.

Marcos dijo...

Gracias, Alma, bienvenida a tu posada.
Saludos.